En la hora del cóctel, pongo aquí un pequeño popurrí. Primero, una crónica del enviado de la Voz sobre el viaje de Touriño a las Américas, que indica que hubo mucho ruido y pocas nueces. Aquí está el artículo.
Prometemos mi loro y yo dedicarnos a la causa de los gallegos en Venezuela en un post próximo. Recuerdo, no más, que en la visita de Chávez a Gallaecia, cuando se dio los croques pertinentes en la catedral, el caudillo venezolano prometió que ningún gallego se vería perjudicado por su política de expropiaciones a pelo. Sin embargo, sabemos el pájaro y yo que ya se habían perpetrado abusos contra algunos gallegos alí instalados. Hubo un reportaje de El Mundo al respecto. Además, un grupo de gallegos afectados le escribió una carta a Zapatero exponiendo sus agravios. O sea, que material hay, el caso es que entre la peluquería y el dominó, no tenemos tiempo ahora para rescatarlo.
Segundo ingrediente: un artículo de César Alonso de los Ríos en ABC a propósito de la idea de Rosa Regás, asombrosamente directora de la Biblioteca Nacional, de retirar la estatua de Menéndez Pelayo de la fachada principal del edificio. Interesante por sus datos sobre el erudito y su análisis del mar de fondo de esa decisión.
And last but not least, un comentario del economista catalán Xavier Sala i Martin aclara con datos el tema de la presunta discriminación salarial de las mujeres.
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¿ABC o Diario de Vocento en la Comunidad de Madrid?
ResponderEliminarEmbajador del Reino de España en la Republicana Bolivariana de Venezuela, el Excelentisimo Señor don Raul Morodo Leoncio, gran amigo de don Jose Bono Martinez, casado con una ferrolana
ResponderEliminarLo de Menéndez Pelayo es indignante. Cuánto sectarismo, cuánta ignorancia.
ResponderEliminarDon Marcelino no es un autor con el que yo esté normalmente de acuerdo. Pero ha sido el mayor de nuestros eruditos. Y, por lo que pueda valer, uno de los grandes prosistas de ls historia de la lengua castellana.
Y aún siendo el gran paladín del catolicismo militante, era de una generosidad de espíritu hacia todos los heterodoxos que estudió. Estudió y resucitó porque antes que él, nadie los había leído.
Aún recuerdo su relato de la muerte de Miguel Servet (gente a lo Regás dice que lo quemó la iglesia católica; fue Calvino). Es una de las historias más conmovedoras que he leído.
Muy bien dicho, Charlotte.
ResponderEliminarEl problema básico de la política moderna y "democrática" es que la casta política (y la cada vez más poderosa clase de los gestores sociales que puluan por las distintas administraciones) se ha propuesto concienciarnos -o sea, moldear nuestra conciencia.
Mejor dicho, se creen con el derecho e incluso la obligación de modificar nuestros hábitos y conductas para convertirnos así habitantes solícitos de la vacía posmodernidad.
Esta gente da más miedo que los comunistas y los nacionalistas juntos.