Por qué se incendia Galicia en el año décimoctavo

Quintana ha interrumpido sus vacaciones para revelar al pueblo la Verdad sobre los Incendios Forestales de Galicia. Nunca hubiéramos sospechado cuál era esa Verdad oculta y sin embargo evidente. Héla aquí: la culpa es del PP.

Pero no crean que por manido el argumento, no puede ser adornado de matices cambiantes y sugerentes. Y Quintana, que está el hombre relajado, le ha dado estos que recoge hoy El País: los incendios se deben al abandono en que se encuentra el rural; es decir, a que el PP mantuvo durante 16 años una política forestal que ha convertido a Galicia en "un polvorín".

Y miren por donde, el "polvorín" no estalló hasta que el PSOE y el BNG no se hicieron con las riendas del poder. Jo, que mala suerte, ¿no?

Qué pucha coincidencia, que durante 16 años de presuntamente inepta y repugnante política forestal nunca se hubieran producido unos incendios como éstos, con la virulencia y la extensión y todo lo demás que estamos padeciendo. Vaya potra tiene el PP, que en sus dieciséis años de gobierno, los bosques no se quemaron como ahora, a pesar de que estaba abandonando el rural y montando el polvorín.

(Bueno, como bien me sopla el loro, ya sabemos lo que están difundiendo por ahí las huestes de Tour y Quin y sus tontos útiles: que son los del PP los que están prendiendo fuego para jorobar al bigobierno. Claro que no tienen ninguna prueba, pero no les hace falta ni les interesa. Ellos lanzan la intoxicación y cómo hay mucho gili de mala baba que prefiere creerse cualquier cosa antes que reconocer que "los suyos" son unos INÚTILES, INEPTOS, MENTIROSOS, MALVADOS Y COBARDES, pues se la cree y la difunde.)

Pero se está extendiendo, en ciertos círculos, otra explicación para ese hecho insólito de que en 16 años de política forestal nefasta y venga a meter munición en el polvorín, no saltara nunca éste por los aires con la magnitud de ahora. Y es que resulta que esa explosión, ese gran desastre, sólo puede ocurrir en el año décimoséptimo o, como mucho, en el décimoctavo, de la política nefanda. No antes. Casi nunca después. Es decir: que son absolutamente necesarios dieciséis años de política forestal deficiente para que se produzcan las condiciones objetivas que llevan a los montes a arder como si fueran un montón de paja.

Dicen los cabalistas que estudian el asunto, que el conocimiento de estos ciclos de 16 años que rigen la vida forestal les fue impartido a los antiguos egipcios a través de aquel faraón que tuvo el sueño de las siete vacas gordas y las siete vacas flacas, y que llamó a José para que se lo interpretara. Cuando tuvo el nuevo sueño, con 16 arbolitos verdes y 16 quemados, José ya se había marchado de Egipto, por lo que la interpretación no quedó muy clara y surgieron dos escuelas: los que decían que el polvorín forestal estalla al año décimoséptimo por tratarse de un número primo, y los que, en cambio, se aferraron siempre al décimoctavo. La verdad es que, en Galicia, han acertado estos últimos. Animados por esto, los estudiosos van a pedirle una entrevista a Quintana para preguntarle si también ha tenido un sueño, como el faraón. Ya les adelantamos desde aquí que el zampabolos de Allariz más que tener un sueño, tiene perpetuamente sueño. Pero allá se las compongan.

El resto, mientras tanto, estamos viendo con indignación creciente cómo estos IDIOTAS no han hecho ninguno de los deberes que se impone hacer en Galicia todos los años para evitar en lo posible los incendios y atajarlos cuanto antes. Siempre la mayoría provocados, por supuesto. No es esta novedad alguna y dejen de hacerse las víctimas, so caraduras. ¿NO decías, Quintana, el verano pasado tras el tremendo incendio en Carnota, que "vamos a por los incendiarios"? ¿A por quién has ido tú, si siguen todos ahí? ¿Qué habéis hecho en invierno y en primavera? ¿Cómo vigilábais el monte? ¿Por qué no se emplearon más recursos hasta que ya fue el descontrol total? Hay muchas preguntas más a las que deben contestar unos gobernantes que está haciendo exactamente todo lo que le reprocharon (injustamente en muchos casos) al anterior cuando el Prestige.