miércoles, 11 de enero de 2012

La "sorpresa relativa" de Rajoy


Aparición Mariana:
"Para mí era una decisión dura, dolorosa, no nos gustaba tomarla, pero era absolutamente imprescindible para detener la espiral en la que podíamos caer. Es verdad que es una decisión desagradable, es verdad que a mucha gente no le gusta; creo que no quedaba otra opción, aunque podíamos haber hecho otras cosas..."

Rajoy también es buenista: “lo hicimos porque no nos quedó más remedio. Fue una decisión muy dura y dolorosa”. ¿Quién podría reprocharle nada si tanto empeño pusieron en no subir los impuestos para cumplir con su palabra?

A pesar de la "sorpresa relativa":
Cristóbal Montoro, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en los que se aprobó el rejonazo fiscal (minutos 6:35-7:50): “En el sector público territorial ya estábamos viendo esa tendencia desde los cambios de Gobierno desde el 22 de mayo de las elecciones autonómicas, ya lo vimos en el caso de Cataluña, y por tanto ahora lo que estamos es en definitiva recibiendo la estimación; una estimación que nace del Ministerio de Hacienda y que también estamos tomando decisiones relativas a encontrarnos en esa situación. Pero que ya estábamos siendo cada vez más advertidos –por analistas, por publicaciones, etc.– de que lamentablemente nos íbamos a encontrar en ella y de que íbamos a tener que tomar decisiones firmes y drásticas, comprometidas con la reducción del déficit público como consecuencia de esa sorpresa que, por lo demás, ya le digo, es relativa”.
Y a continuación De Guindos: "efectivamente una parte importante de esta desviación significativa estaba ya relativamente descontada".

Y aún así y todo:
¿Alguien se cree que, en un Estado que gasta 455.000 millones de euros anuales, no pueden recortarse 6.200 millones (el 1,3% del total) de ningún lado?

No hay comentarios:

Publicar un comentario