Últimamente los nacionalistas, conseguida la discriminación del castellano en sus territorios, y notando que, a pesar de sus esfuerzos, los nativos persisten en usarlo, han introducido en su vocabulario un nuevo concepto: el derecho a vivir en gallego (o catalán o vasco).
Básicamente este derecho (?) consiste en que, en las calles de Vigo y Barcelona, la lengua que se escuche y habla, la lengua que fluye por las ondas, sea únicamente la vernácula. La imagen que usan es la de París; allí no se oye otra cosa que el francés. Este supuesto derecho (por cierto, la idea de que las lenguas tienen derechos es bastante fascistoide) es un paso más allá que el derecho a ser educado y atendido en gallego. Los oídos nacionalistas, siempre tan delicados, no pueden soportar la mancilla de que lenguas ajenas a la "propia" sean habladas por los autóctonos.
Por supuesto, tras este concepto, se halla una filosofía nazi del mundo. Lo digo así, advirtiendo de que no soy de los que usan las palabras nazi y fascista en vano. Podemos ver en esta idea el sueño de la pureza patriótica, el sueño de los orígenes, el sueño de una patria cerrada y feliz no deturpada por las influencias externas de un mundo siempre abierto y cambiante. La patria con la que sueñan, la Felix Gallaecia gallegohablante, lógicamente jamás ha existido. En la Galicia medieval se escribía en latín, en las ciudades se hablaba no sólo gallego sino francés e italiano, muchos pueblos, nacidos de poblaciones inmigrantes propiadas por la realeza y la iglesia, hablaban leonés, mozárabe. Y el idioma castellano penetraba como lengua de intercambio desde el siglo XIV.
Pero el sueño de la pureza, la esperanza de una patria intacta e incontaminada, en la que nuestros castos oídos no son pervertidos por lenguas ajenas permanece. No en el común de la población, sino en el de una minoría incapaz de afrontar el mundo abierto y diverso que nos ha tocado vivir.
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Cada gallego ya tiene la libertad para expresarse y vivir en el idioma que quiera. Pero con unos límites, claro. Los impuestos por la libertad de cada uno de los demás gallegos.
ResponderEliminarTú lo que quieres es OBLIGAR a todos los gallegos a hablar en gallego, a que haya etiquetas en gallego en todos los comercios, etc...
Pero eso depende de los dueños (gallegos también) de esos locales.
De ahí que vuestros deseos tengan ese color fascista. No queréis la libertad individual. Eso no va con vuestro "compromiso".
Libertad individual. FREE GALICIA!!
No a la política autoritaria de los naci-onalistas.
El que quiera hablar en gallego que hable en gallego. Es su derecho. También educar a sus hijos en gallego, si es su deseo.
El que quiera hablar en castellano que hable en castellano. Es su derecho. También educar a sus hijos en castellano, si es su deseo.
¡¡GALICIA CEIBE, PERO DE VERDAD!!
NO a la ley (naci-onalista) de inmersión lingüística del PP.
ResponderEliminarNingún gobierno pinta nada diciéndole a los ciudadanos en qué idioma que comunicarse.
El benegé debería hacerle una estatua a Fraga por poner en marcha esa política lingüística. Fraga, militante honorario del BNG.
Reclamamos el derecho a nuestro personal autogobierno. Fuera las zarpas de los políticos.
Rouco dixit: "Soa paradóxico que os defensores e herdeiros do nacional-catolicismo..."
ResponderEliminarCualquier estudio genealógico de las ideas nacionalistas nos dice que ellos son los verdaderos herederos del nacional-catolicismo español. Ejemplo: Pujol y Castelao citando las tesis de Menéndez Pelayo, reformulador del nacional-catolicismo, en favor de la España plural. Otro ejemplo: los nacionalistas vascos expresando las mismas ideas racistas que llevaron a sus abuelos a exigir del rey el estatuto de limpieza de sangre.
Un último ejemplo: los bloqueiros rememorando a los suevos, en la vieja línea del nacional-catolicismo de vincular el nacimiento de España con los godos. Ya lo decía Quevedo:
"Las descendencias gastan muchos godos/ todos blasonan, nadie los imita/ y no son sucesores sino apodos"
Así pues, amigo Rouco, te animo a que salgas del armario. Mírate al espejo y reconoce que ERES UN FACHA. Sólo que los fachas de antaño decían España donde tú dices Galicia; Y tú dices lingua e pobo, donde los nazis decían raza.
Sí, Rouco, eres un facha ígnaro y vergonzante
Rouco, el gallego que reniega tanto de la Galicia real que trata de inventarse otra, dixit: "nen o castelán penetrou até que chegou o ensino obrigatorio(exclusivo en castelán)"
ResponderEliminarCastellanismos en Galicia desde el siglo XIV; castellano como lengua escrita de Galicia, siglo XV (Rodríguez del Padrón, por ejemplo); último escritor en gallego: el castellano Gómez Manrique, tío de Jorge.
Sobre repobladores hablando otra lengua que el gallego: los nacionalistas gustáis de hablar de la comarca cacereña que ha hablado gallego hasta hace poco.
Sobre pelagatos falando en extranjero: Un profesor de gallego me explicaba que alguien (creo que Bouza Brey) había demostrado el uso del francés en Bayona durante varios siglos.
Ah, por fin dices que la expansión del castellano viene ligada a la enseñanza en la escuela. Lo digo porque os gusta dar la impresión de que aquí se prohibió hablar en gallego. O sea, las razones de la expansión del castellano son las mismas que las del francés, italiano e ingles. ¿Por cierto, tienes noticias de que en Edimburgo el estado trate de proscribir el ingles, y de que en Bretaña luchen por usar el bretón para uso escolar?
Ahora, Rouco, repite conmigo: SOY UN FACHA Y NO LO NIEGO. Mi abuelo izaba la bandera de España, yo la gallega. Esa es la única diferencia.
"No tienes ni puta idea" Olé, tus güevos, rouco.
ResponderEliminarLo de Castelao y el nacional-catolicismo. Como siempre, coges el rábano por las hojas. Intelligenti pauca, decía el otro. Y siempre espero del que lea aquí, sobre todo si viene a insultar, que intente entender lo que digo.
Tú me vienes a contar aquí el exilio de Castelao ... y ¿a qué viene eso? Hablo de ideas, hablo de la vinculación de Castelao con las ideas de Menéndez Pelayo, cuando afirmaba, citando expresamente al furibundo montañés, que Hespaña (sic en Castelao) era grande cuando permitía que cada uno de sus pueblos se expresara siguiendo su espíritu y su idioma.
Insisto: el nacionalismo periférico es el último rescoldo (la parodia, casi) del nacional-catolicismo.
Sobre tu consejo de que viajes, de que visite Bayona, cual si uno fuera un extraterrestre.... ¿no te das cuenta de que somos gente que ha viajado por el mundo y por Galicia, que hemos leído, que hemos estudiado, que no bastan con tópicos y regüeldos?
Por cierto, me encanta cuando veo que te cabreas, se nota entonces que damos en el clavo
+
Y se cabrea a menudo además. Igual que el otro menda lerenda.
ResponderEliminarRouco dixit: "a Madrid só irían os que agora van, os fillos de papá que na pública nunca sacarían un título universitario"
ResponderEliminarDios mío, qué mente más sucia y mezquina la tuya.
Por supuesto Cato. A este Rouco ya lo hemos calado hace tiempo.
ResponderEliminarMal ejemplo para los gallegos. No sé que dirían en su familia si supieran lo que escribe este neno en sus ratos libres. Lo más probable es que ni él lo haya pensado nunca. Un nazi en la familia.
Mira que decir que Fraga negó el holocausto después de saber que era mentira. Una pena el chico este.
La educación de calidad no será la enseñanza única que nos dé papá-estado.
ResponderEliminarLos papás (los verdaderos) deben poder elegir entre diversas ofertas en competencia la que más les guste para sus hijos. ¿Qué menos, no?
Cheque escolar.
Me gusta mucho orto. Sobre todo pienso que es una persona sensata e inteligente. Si todos fuéramos así... ¡Cuántos problemas nos ahorraríamos!
ResponderEliminarLástima(?) que no sea el caso y haya que lidiar con la variedad humana. No puedo discutir nada de lo que dice orto, me siento muy próximo, simplemente digamos que me siento algo más próximo a ese funcionario español, vivo y pragmático, que se enfrenta a lo que hay procurando salir del atasco en el que se queda el director de la Comisión. Otro gran tipo este director, no lo dudo.
Rouco, no dijiste tú:
ResponderEliminar"Ogallá fora obrigatoria a educazón total en galego, dúas materias en inglés(a propia e outra) e despois a propia de español, a Madrid só irían os que agora van, os fillos de papá que na pública nunca sacarían un título universitario.", eh?
Sí que eres excluyente.
¿Qué quieres quedar de güay ahora?
Entonces empieza a hablar en serio y dinos de verdad lo que piensas, sino tendremos que pensar que ya lo has hecho.
¿O sólo estabas jugando?
¿Educación libre no dirigida por el estado? A ver. ¿Sí?
A mí el gallego no me poduce ningún "arrepío". Mal disimulas tú el que sientes por el castellano.
ResponderEliminar¿En qué fundamentas tú que haya OBLIGATORIAMENTE una asignatura en castellano? ¿Por qué no ninguna o dos o cinco?
¿Por qué no liberalizar la enseñanza y que cada padre decida el centro que más le conviene a sus hijos? ¿No son los padres los más indicados para decidir?
Eres excluyente y autoritario. Te molesta mucho que los demás te levanten la voz y te contradigan.
Tiene que ser como dices tú. A la fuerza si es necesario, pues, como decía Castelao:
"SE O POVO NON QUIXERA ENTERARSE do que lle convén e fixese desprezo do remedio que pode salvalo, ¿haberá algún home de fe que deixase de IMPOR ESE REMEDIO AÍNDA POLA FORZA, SE DISPUSEXE DE PODER PARA TANTO?"
Y tú eres un hombre de fe, Rouco. Estás convencido de tener la razón. Lo sientes en tu interior. Es un compromiso. Tu compromiso.
Imponer el remedio por la fuerza, si fuese necesario.
(Este comentario no contiene ninguna errota)
Rouco dixit: "porque como saberás o seseo ademáis de darse no galego popular, é de uso correcto no galego oral"
ResponderEliminarAquí, en esta frase, está el meollo: para Rouco el gallego popular (el del pueblo) no es lo mismo que el gallego oral (el que se habla). En medio están los normalizadores, que a veces aceptan (parece ser que el seseo lo aceptan), a veces no, lo que dicen los gallegos.
El mismo tono de la frase nos dice mucho. Nos habla de la condescendencia de Rouco y los suyos hacia los hablantes. Ellos son los que dicen qué es correcto, qué no lo es.
El idioma, por tanto, es de ellos. Y es cierto, porque no es un idioma, el gallego normativo, construido por la población, decantado por los siglos, que fluye por todos los órdenes de la sociedad. Es un artificio de reciente facturación, diseñado por unos pocos, e impuesto mediante leyes a los gallegos. Y los gallegos, simplemente, no gustan de él.
¿A alguno de nosotros se nos ocurriría pensar que el seseo de los andaluces es incorrecto? Los normativizadores lo han pensado y han decidido que el seseo de los gallegos es "correcto".