martes, 4 de abril de 2006

¿Alguien cree a ZP cuando dice que "el proceso" va a ser largo?

Yo no. Mi loro tampoco. Somos gente que no entregamos nuestra confianza al tuntún y menos al tontón. Zapatero es menos fiable que un cubata con alcohol de garrafa. Da el pego cuando te lo sirven, parece normal, como todos, al sabor apenas se nota la diferencia, pero en cuanto lo llevas mediado, te entra un algo por el cuerpo que no sabes qué es; si conservas un ápice de lucidez te das cuenta: garrafón.

Zetapé va de promesas cumplidas, pero sólo cumple las que le convienen, cuando le conviene. Iba a retirar las tropas de Irak si antes del 30 de junio no había una resolución de la ONU; pues bien, la hubo y España, o sea, él en su nombre, votó a favor. Pero ya se había encargado de retirarlas semanas antes. Y aún lo presentó como promesa cumplida. ¿Cuál cumplía? ¿La de hacía un mes o la de hacía una semana?

¿Y aquella reunión con Rajoy en la que acordaron que ambos partidos crearían una comisión bilateral para abordar juntos las reformas de los Estatutos? En cuanto Mariano acabó de contarles eso a los periodistas, ya estaba Rubalcaba Productions contactando con ERC y demás amiguetes para asegurarles que de eso nada, monada. Y en efecto, nunca más se supo.

No hablemos de las grandes palabras, tipo transparencia democrática y cosas así. Todo lo ha hecho entre bambalinas. Y en cuanto a "escuchar a los ciudadanos" o gaitas por el estilo, se limita a recibir a la gente -a alguna gente-, como los anti-LOE o las víctimas del terrorismo-, a dar la impresión de que les hace caso, y luego o los enreda en algún laberinto o ni caso.

ZP ya era así antes de llegar a los predios monclovitas. Recibió un día, siendo secretario general de la Pesoe, a los integrantes de cierto grupo comprometido en la lucha por la libertad en el País Vasco; les dijo que el partido apoyaría una reforma del Código Penal que apretaría las tuercas en punto a terrorismo; al día siguiente, gran titular de la prensa: la Pesoe no apoyará la reforma de tal y tal.

¿Mal común a los políticos? Sí, pero unos están más enfermos que otros.

Pero a lo que íbamos, el llamado "proceso" (que no se ha abierto con el alto el fuego, pues llevaba tiempo negociándose) tiene toda la pinta de que irá a todo gas. Ya piensa ZP dar por zanjada, antes del verano, la verificación del cese de la violencia. Ya Conde-Pumpido encontró la excusa para no pedir la prisión incondicional de Otegui y las que vengan. Ya va a pedir ZP la implicación de la ONU en el "proceso", que es una de las exigencias perennes de ETA: la "mediación" internacional. Y tantas y tantas cosas, detallitos que se van viendo, y en particular, en los socialistas vascos.

ZP esperaba un gesto de ETA hacía tiempo, el gesto ha tardado, el calendario va retrasado. Esto tiene que hacerse rápido. Como lo ha hecho todo. La rapidez, que puede además venir exigida por otros (ETA), también le conviene como táctica: da menos tiempo a reaccionar. Muchas barbaridades a la vez, en poco tiempo, confunden y debilitan la capacidad de respuesta. Es por ello que el loro y yo nos apostamos el bigote y las plumas del cogote a un "proceso" acelerado. Apostado queda.

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