El talón de Aquiles de aquel sondeo de El Mundo

Era...bueno, eran. Pero tenía uno que no se lo salta un canguro. Hablo del sondeo sobre el debate parlamentario, claro está. Aquel que en el diario de Pedro J. se dio como ganado por ZP, para sorpresa de no pocos. O sea, el debate sobre la política ¿antiterrorista? del Gobierno. La muestra era de 700 entrevistas. Perfecto. Ahora bien, sólo opinaron sobre el debate los entrevistados que habían seguido el Pleno, y que en porcentaje suponían el 59,7% de los setecientos susodichos.

Por lo tanto, a la hora de las opiniones (quién ganó el debate, cómo califica la intervención de uno y de otro, tras seguir el debate su opinión sobre uno y sobre otro), la muestra se nos ha reducido a 418 entrevistas. Así que decimos el Loro y yo: ¿acaso con esta nueva base, no se incrementa el margen de error? Según nuestro barman, que lleva toda la vida estudiando estadística detrás de la barra, la respuesta es afirmativa. El margen de error se ha visto incrementado, y nosotros sin habernos enterado.

Dicho sea que ni el Loro ni yo creemos en la manipulación de los resultados de una encuesta por parte de las empresas que se dedican a tan noble actividad. Creemos, sin embargo, que las preguntas pueden canalizar, orientar y llevar al entrevistado hacia las aguas que interesen a los impulsores del sondeo, es decir, a quienes lo pagan. Y eso también ocurría en este sondeo. Aunque el dato más grave nos parece el otro, el de la reducción de la muestra.

Y el caso es que nosotros, o sea, el otro y yo, opinamos que ZP, precisamente porque fue un desastre, un baballas y un cagapoquito, llegó más a la gente que un tío con un discurso sólido, sistemático y racional como Rajoy. Hay mucho Zetapé polo mundo. Y es erróneo pensar que todos los citizens desean un gobernante inteligente. No pocos prefieren a un tío más tonto que ellos.