viernes, 22 de diciembre de 2006

Ese galleguismo cuyo orgullo se edifica sobre una mentira

En un discurso en el Parlamento de Galicia por los 25 años del Estatuto de 1980, hace ahora un año, Alberto Núñez Feijóo hizo también referencia (no podía ser de otra forma) con satisfacción al Estatuto de 1936 sin olvidarse de hacer mención a los "injustificables acontecimientos vividos en España desde 1936 [que] impidieron que aquel Estatuto pudiese llegar nunca a ser aplicado".

Todo el discurso es una loa al sentimiento galleguista y a los gallegos y gallegas "que se sienten galleguistas" y por tanto herederos de y a la vez comprometidos con la tradición galleguista a cuyos históricos fundadores "desde Brañas a Castelao, desde Risco a Bóveda" "tenemos que" dar las "grazas" [sic]. No se olvide, don Alberto, de Enrique Rajoy Leloup, otro de los artífices.

También aclara el señor Núñez Feijóo, lúcidamente, que "sin ellos, sin sus ideas y sin su valentía en defenderlas, hoy no estaríamos aquí".

Ni se olvida de las oportunas dosis de demagogia sin las cuales parece imposible hacer política
"El triunfo del Estatuto de Galicia [de 1980], es el triunfo de un pueblo orgulloso de si mismo."
y el compromiso
"El Grupo Parlamentario que tengo la honra de representar hoy aquí se compromete en la defensa de este Estatuto que incluye su eventual reforma que será guiada solamente, como Brañas, por el «amor ilimitado, sincero y casi idolátrico que le tenemos a nuestro hermoso país»"

¿Es posible que a estas alturas (incluso hace un año) nadie le haya contado a Núñez Feijóo que el Estatuto de 1980 lo votaron afirmativamente alrededor de un 73% del 28% del censo de electores?
O sea, apenas el 21% de la población con derecho a voto.
¿Qué es eso de que "El triunfo del Estatuto de Galicia, es el triunfo de un pueblo orgulloso de si mismo"? (Un año más tarde ya pasa a hablarnos del genoma)

¿Y nadie le ha contado tampoco lo del "santo pucheirazo" en el plebiscito de 1936?

Se lo podría contar, por ejemplo, Pedro Puy Fraga, el mismo que le acompaña en esta foto

y que escribió:
Como está fondamente argumentado desde varias teorías do dereito (incluída a análise económica das normas), existe unha fonda relación entre o cumprimento e respecto das normas xurídicas e o grao de interiorización que desas normas teñen os cidadáns. A participación na elaboración das leis axuda a súa interiorización. E este aspecto é, na miña opinión, crucial en Galicia, tendo en conta os antecedentes abstencionistas do referendum de decembro de 1980, e incluso os do "santo pucheirazo" do referendum de 1936.

Yo creo que ese es el camino: contar de verdad con los ciudadanos y dejar de contribuir, ya sea por activa o por pasiva, a perpetuar el engaño.

4 comentarios:

  1. Los gallegos tambien se quieren separar?

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  2. ""Con o sin «santo puchrazo», el Estatuto salió adelante"

    Qué bueno. Tanta respuesta para cagarla de esa forme.
    Y es que sin esa mentira...

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  3. Pues los musulmanes piensan 3/4 de los mismo pero cambiando el objeto del deseo:

    http://www.webislam.com/?idt=6425

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