Curiosa Rahola

Curioso artículo el de Pilar Rahola en El Periodico. Se acordarán de ella. Era la joven terrible del nacionalismo catalán hasta que su desenvoltura opinativa cayó en gracia en Madrit, lo que la hizo apuntarse a la España plural y a liberarse mentalmente de la secta nacionalista.

Su artículo en El Periódico, sin embargo, muestra que los mitos de la patria, sobre todo la lengua, pesan demasiado en su mente. Escribe Rahola sobre la polémica de la tercera hora de castellano, obligada por la ley estatal, y que el gobierno catalán ha decidido asumir parcialmente, al dar libertad a los centros que así lo prefieran. Rahola analiza -yo creo que perspicazmente- las consecuencias:

En apariencia, los dos ganan. Carod aparenta frenar el decreto del castellano, y así da carnaza independentista a su militancia hambrienta, y Ernest consigue colar el decreto por la puerta de atrás. Nadie protesta y todos más felices de haber superado el trago, que de la bondad del resultado. Sin embargo, el resultado, de bueno no tiene nada, más allá de salvar el trasero partidista. Por obra y gracia de un trapicheo político, hemos abierto la puerta a la libre elección de idioma , trasladando a las escuelas un problema lingüístico del que, hasta ahora, se libraban de milagro.

Puede que sea un buen acuerdo para la estabilidad del tripartito, pero es una sandez educativa cuyas consecuencias solo pueden ser negativas para el catalán. Y, ¿ahora qué?, ¿debate lingüístico en las escuelas? Y, ¿qué idioma saldrá derrotado? Además, abierta la puerta al debate lingüístico, ¿quién frenará el proceso hacia la doble línea educativa? Campo minado. Lo dicho.

Observen las quejas de Rahola.

1. Se debatirá sobre la libertad de idioma, lo que, evidentemente, es un horror.

2. Habrá problemas lingüísticos en las escuelas. Antes los había -los datos son conclusivos sobre las consecuencias educativas en los niños castellano-hablantes-, pero los problemáticos no se atrevían a alzar la voz.

3. Las consecuencias sólo pueden ser negativas para el catalán. El hecho de que sean positivas para el sistema educativo es irrelevante. La educación es secundaria frente al "hecho nacional"

4. La puerta al debate lingüístico está abierta. Es decir, el nacionalismo catalán no se puede permitir el lujo de debatir sobre la cuestión del idioma. Lógico, si se debatiera racionalmente, quedaría claro que el catalán, hoy como siempre (léase a Lodares, Lengua y Patria), es un sistema fantástico de dominación social de una oligarquía.

P.D. Se lo leí hace años a Francisco Nieva. Mencionaba la curiosa enfermedad intelectual que aquejaba a muchos catalanes. Eran personas inteligentes, sensibles y razonables que, en cuanto oían la palabra Cataluña o catalán, abandonaban su bonhomía y se convertían en fanáticos incapaces de pensar objetivamente. Me parece que Rahola, que se estaba recuperando, ha sufrido una recaída.